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Katherine Orrego accedió a un alivio y hoy está tranquila

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Historias de alivios

La solidaridad no puede ser solo para los momentos difíciles, dar alivio y ser solidario debe ser de todos los días. Por eso en Confiar llevamos 48 años en modo alivio y en la pandemia hemos intensificado este esfuerzo. 

Al cierre de mayo 27.167 mil personas han recibido alivios en su compromiso crediticio con la cooperativa y 25.765 han recibido el beneficio del 3% en la tasa de interés efectiva anual como abono a capital, por un valor superior a los $1.130.358.300.

¿Quieres conocer el rostro de uno de estos beneficiados?

Como muchos colombianos, cuando el coronavirus llegó a Colombia y las empresas comenzaron a enviar a sus empleados a trabajar desde sus casas, Katherine pensó que sería una medida temporal. Días más tarde, recibió una llamada en la que le decían que su contrato quedaba suspendido, porque la actividad textil y comercial de su empresa estaba frenada.

“Cuando me llamaron lloré. Son muchas emociones, porque llevo muchos años trabajando, entonces fue un golpe fuertecito y uno acomodarse al ingreso de la pareja para cubrir todas las necesidades que una familia tiene. Lo que también me angustiaba era el tema que me fueran a reportar, porque tengo el proyecto de comprar casa, entonces trato de ser muy puntual con el crédito que tengo; porque sé que el próximo año voy a necesitar el crédito de vivienda”.

Katherine es asociada a Confiar hace más de tres años, tiene un crédito de libre inversión. “En el momento en que empezó la pandemia tenía una cuota por pagar en la quincena de marzo. Cuando pasó lo de mi trabajo, me comuniqué a la línea, recibí la asesoría, me indicaron que podía tomar el alivio hasta por tres meses y me dijeron que tenía que hacer. Hasta la asesora me esperó a que descargara la carta y anexara la información de codeudor, que es mi papá. Me dieron la respuesta como en dos semanas después al correo. Allí me decían que estaba aprobado. Ya con eso me tranquilicé”.

El pasado 30 de mayo Katherine no había reiniciado labores en su empresa, de nuevo sintió la angustia por el pago de su crédito. “Al ver que todavía no había retomado mi contrato me preocupé para pagar la nueva cuota. Pero miré en la página y tenía una nueva prórroga. Llamé preocupada porque creí que era un error y me explicaron que era automático y que las cuotas pasaban al final”

El pasado 2 de junio Katherine comenzó a laborar de nuevo y eso la tiene muy contenta y aliviada, porque, además de volver a trabajar, puede responder por su obligación de crédito.

“Yo le digo a las personas que se animen que es fácil la solicitud, se puede hacer por la línea, por el chat, incluso en la página la información es muy clara para hacer el proceso uno mismo. Aunque no es bueno para nadie alargar el crédito, tener la posibilidad es un beneficio para uno en este momento”.